
Así, con un texto en sus pasajes más místicos
cortapegado de una web de tarot, justifica la comisión gestora del
desarrollo del entorno del Vicente Calderón la construcción de
cinco torres de hasta 24 alturas sobre lo que era la fábrica de la cervecera.
El Ayuntamiento de Madrid certifica que todo es legal y lo aprobará en Pleno el
próximo miércoles.
La justificación para construir «edificios singulares»
que superen las alturas del entorno, de apenas siete plantas, tal y como consta
en el tomo I del expediente del Plan Parcial de la 'Operación Calderón', redactado
por la denominada comisión gestora (formada por los propietarios, Mahou y
el Atlético, y por los promotores, FCC), podría considerarse alta literatura.
Primero arranca con una serie de devaneos
semánticos, a modo de preliminares plenos de verborragia típicamente
urbanística: «Un acontecimiento singular requiere un proyecto singular en su
conjunto, pero también singular en sus partes». Asegura también que Madrid Río
es un «nuevo centro» de la ciudad, y que lo que en el hueco dejado por el
Calderón se construya será la «NUEVA PUERTA DEL SUR», así en mayúsculas.
Se estima luego que se convertirá en edificios
singulares apenas un 4% de la superficie total, y se remata que «sólo una
parte de ellos, aquellos que por su singularidad estarán llamados a ser
emblemáticos, superarán la altura general de los edificios colindantes».
Prosigue: «En este apartado se detallan las razones que justifican o permiten
sostener la singularidad de una parte minoritaria de los edificios».
Lo siguiente hay que ahorrárselo al lector. Es una
serie de cábalas que trazan distintos ejes y círculos concéntricos en torno
al centro, norte y sur de Madrid para justificar que sí, que todo confluye en
la esquina de tierra que ahora ocupa el Vicente Calderón, y que en pocos años
ocupará el magno espacio construido por FCC.
Y de pronto, sorpresivamente, un párrafo referido
al corazón del complejo: «La irregular geometría de la manzana debe
simplificarse mediante varios elementos singulares cuya altura puntee su
contorno, delimitando una figura geométrica rotunda». No desfallezca el lector,
que ahora viene lo bueno.
A palo seco: «Parece claro que la imagen más
adecuada es una estrella invertida de cinco puntas, una de las estrellas
que forman los escudos del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid; una estrella
que permitirá mantener para siempre la huella de las estrellas características
de la cerveza Mahou, cuya iconografía ha marcado los últimos 50 años de la
historia del entorno». Parece claro, pues.
La razón de la cosmogonía

Este último y convengamos que glorioso párrafo, de
alto interés urbanístico, está copiado a machete de una web de tarot. Se
coloca íntegro en Google y el buscador dirige a un manual de numerología
alojado en el sitio Mailxmail.com, en el que se comparten saberes en línea.

Esto otro está extraído directamente de la entrada
de la palabra 'cinco' en Wikipedia. Pero nos queda la conclusión: «Cinco es
el número ideal de torres que deben reforzar la singularidad de la nueva
MANZANA MAHOU, cuyos edificios singulares se denominarán precisamente M, A, H,
O y U, cada una de las letras de su nombre».
Los argumentos municipales

«Se hicieron tres estudios -añaden- El primero, con
los edificios de entre cinco y siete plantas, pero quedaban muy pocas zonas
verdes. Con 10 plantas, igual. Con las torres se libera espacio, y eso es lo
que miran los técnicos, nada más».
Las cinco torres de inspiración estelar se levantarán
en una manzana por detrás del Vicente Calderón una vez que el estadio haya sido
borrado del mapa. Son sólo la mitad de los edificios que tendrá este nuevo
barrio de la capital, en el que están incluidos dos rascacielos de 36 plantas
que tendrán vistas al Manzanares. En conjunto suman más de 175.000 metros
cuadrados de edificabilidad que se repartirán en unas 2.000 viviendas y un
número indeterminado de oficinas.
'Culebrón' judicial

El 'culebrón' judicial no ha termina de desenroscarse
del todo, pero el Pleno del Ayuntamiento de Madrid dará el visto bueno
definitivo al proyecto el próximo miércoles tras validarlo previamente en la
Comisión de Urbanismo de esta semana con la mayoría absoluta del Partido
Popular y el voto en contra de la oposición en bloque. Entre medias el Gobierno
de Ignacio González modificó en 2013 la normativa que restringe el número de
pisos a los suelos urbanizables, por lo que los urbanos -como éste- quedan
exentos de la limitación y los 10 edificios previstos se podrán construir
presuntamente sin más sobresaltos.
De las alegaciones presentadas al plan parcial que va
a ser la columna vertebral de este ámbito, se ha admitido parcialmente a
trámite una presentada por un particular que cuestiona la distribución de los
inmuebles porque no se ha respetado la separación entre las fachadas de
orientación sur para garantizar que en todas las viviendas dé el sol
durante el invierno. El compromiso municipal es que se va a instar a la
promotora del desarrollo a que amplíe el estudio sobre el particular, aunque
sin aclarar en qué términos.
QUICO ALSEDO / MARTA BELVER
http://www.elmundo.es/madrid/2014/11/21/546e741ce2704eae1c8b456f.html