miércoles, 22 de mayo de 2013

Ronald Poppo: LA VICTIMA DEL ZOMBI CANIBAL DE MIAMI REAPARECE UN AÑO DESPUES


 
"La gente en circunstancias como la mía necesita ayuda. Agradezco la efusividad de la gente de la comunidad. Siempre estaré agradecido por eso". Así Ronald Poppo, la víctima del caníbal de Miami, agradeció a la gente y a los especialistas que estuvieron cerca de él un año después del brutal ataque que sufrió.
 
En vísperas de que el domingo se cumpla un año de aquel ataque, el Jackson Memorial Hospital ofreció este martes una conferencia de prensa en la que dio detalles de cómo se encuentra Poppo y difundió fotografías en las que se aprecia la evolución de cómo le quedó la cara después de numerosas intervenciones para tratar de reconstruirla.
En Twitter con el hashtag #Wishes4Poppo miles de usuarios le dejaron su saludo. "Qué bueno que ya te estés recuperando. La sociedad ahora te espera como un nuevo ser humano y ejemplo de constancia a seguir", dijo una twittera mientras que otros le deseaban "continuos progresos" y "vibraciones positivas".
 
Sin ojos y prácticamente sin nariz, este hombre de 66 años, que vivió mucho tiempo como indigente en las calles de Miami, comentó estar feliz y agradecido por las muestras de apoyo recibido, tanto a través de donaciones económicas, como de mensajes de ánimo y regalos. Sus médicos sostuvieron que ya puede vestirse, alimentarse, bañarse y afeitarse solo, mientras pasa los días la clínica de cuidados prolongados al sur de Miami. 
 
El 26 de mayo de 2012 Poppo se cruzó con Rudy Eugene en la vereda uno de los puentes que unen por autopista Miami y Miami Beach. Allí Eugene le devoró más de la mitad de su rostro, en un cruento ataque que tuvo mucha repercusión mediática. La policía mató al victimario y la secuencia fue grabada por una cámara de seguridad.

1 comentario:

  1. Pobre tipo, es surrealista lo que le pasó. Hubieron más casos relacionados con esta droga... creo haber escuchado o leído de una madre que se comió a su hijo o por lo menos lo había intentado. Una locura aunque no es más que un crudo reflejo de lo que se ha convertido el ser humano como individuo y la sociedad en sí.

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