jueves, 18 de febrero de 2010

Nuevo enfrentamiento entre los McCann y Gonzalo Amaral en los tribunales

ANSA)- Los médicos británicos Kate y Gerry McCann, padres de la niña Madeleine desaparecida desde mayo de 2007 en el sur de Portugal, renovaron su pedido en ese país para dar con el paradero de su hija. La pareja se encuentra en Lisboa para participar de una demanda judicial contra el ex investigador de la causa por la desaparición de Maddie, Gonzalo Amaral.

Fuera de la corte, los McCann mostraron pancartas con las imágenes de Madeleine y un número de teléfono portugués para que la gente llame en caso de tener información sobre la menor. "Lo importante es recordar que una niña sigue desaparecida", afirmó Kate ante los periodistas. Además, la pareja pidió que la investigación por la desaparición de su hija sea revisada enteramente por la Policía portuguesa y británica.

Este miércoles, los McCann escucharon las últimas audiencias en el juicio de demanda contra Amaral, por una autobiografía en la que el ex detective acusó a los padres de Madeleine de su desaparición. Los magistrados lusos anunciarán el próximo 18 de febrero si el libro debe ser o no prohibido.

Según Gerry McCann, la principal razón por la que decidieron lanzar la demanda es para que la gente siga buscando a Madeleine. "Si la gente cree innecesariamente que ella está muerta sin evidencia alguna, dejarán de buscarla", destacó. Por su parte, los abogados de Amaral calificaron el caso como un ataque a la libertad de expresión y prometieron que llevarán la causa a la Corte Europea de Derechos Humanos en caso de perder la demanda. Los McCann también le reclaman al ex detective portugués el pago de 1,6 millones de dólares por una causa separada de libelo.


lunes, 15 de febrero de 2010

András Pandy, el sacerdote asesino


András Pándy nació en Chop (Ucrania) el 1 de junio de 1927. Estudió teología y después se convirtió en pastor protestante. Pándy conoció a su primera esposa, Ilona Sorés, en 1957. Tras la etapa comunista, huyeron de Hungría a Bélgica. Un año después, nació su hija Ágnes; sus hijos Dániel y Zoltán nacieron en 1961 y 1966, respectivamente.


Un año después la pareja se divorció cuando Pándy acusó a Ilona de infidelidad. Ella se fue de la casa con sus hijos, pero dejó allí a su hija Ágnes, quien pronto comenzó a sostener una relación incestuosa con su padre. De esa unión nacería un niño.

Ágnes Pandy
A principios de los años setenta, Pándy cortejó a otras mujeres a través de los periódicos, dándoles a menudo un nombre falso y mintiendo sobre su ocupación. Usaba la llamativa frase “Luna de Miel Europea" en sus anuncios.

A finales de la década, visitó Hungría de nuevo; allí conoció a quien sería su segunda esposa, Edith Fintor, una mujer casada con tres niños: Tünde, Tímea y Andrea. Pándy sedujo a la mujer que, según su ex marido, se escapó con Pándy a Bélgica, donde se casaron.

En 1984, Pándy empezó otra relación incestuosa con su hijastra Tímea. Ágnes, en un ataque de celos, intentó matar a Tímea, pero el miedo la venció y no pudo continuar. Tímea huyó de la casa y pronto emigró a Canadá junto con Mark, el hijo que había concebido con András.

Las desapariciones comenzaron en 1986: primero fue su esposa Edith. Su hijastra Andrea, de trece años de edad, señaló a Pándy como sospechoso, pero no le hicieron caso; este afirmó que Edith se había fugado con un nuevo amante a Alemania. En 1988, su ex esposa Ilona y sus hijos desaparecieron. Pándy dijo primero que se habían ido a Francia, luego que estaban en América del Sur. Finalmente en 1990, después de enviar a Ágnes de vacaciones con el hijo producto del incesto, Tünde desapareció: Pándy afirmó después que lo había corrido de la casa debido a su mal comportamiento.

Ágnes trabajaba como bibliotecaria y era querida y respetada por los miembros de la comunidad. Su vida era aparentemente tranquila. Su padre efectuaba sus servicios religiosos y su feligresía lo estimaba y quería como a un hombre bueno, que los escuchaba y les daba consejos y guía espiritual para mejorar sus existencias.

Sin saber lo que realmente ocurría, sus feligreses habían bautizado al pastor como “Padre Barba Azul”, debido a la negrísima barba que utilizaba en esa época. Cuando la verdad se supo, el sobrenombre tomó un nuevo y macabro significado.

Ágnes en sus días de bibliotecaria
Ágnes explotó en noviembre de 1997: después de denunciar a su padre en 1992 por el abuso sexual, volvió a acudir a la policía, confesando los asesinatos de sus desaparecidos parientes. Según declaró, ella sabía sobra la muerte de todos, aunque personalmente solo era responsable por el asesinato de su madre Ilona, y había colaborado en el asesinato de Dániel, Zoltán y Andrea. Ágnes se negó a decir nada sobre la desaparición de Tünde.

El modus operandi fue, en dos casos, la utilización de un objeto contundente, con el que ella y su padre destrozaron el cráneo de sus víctimas. A otros dos los mataron de un tiro en la cabeza. Los cadáveres fueron desmembrados después. Algunas partes del cuerpo las disolvieron en un tambo con ácido que había en el sótano.

Otras partes las llevaron a un matadero local para que las picaran como carne de cerdo. Más restos fueron abandonados en bolsas en el basurero de Anderlecht, un barrio de Bruselas, cercano a los rastros.

Pándy fue detenido en octubre de 1997 acusado de asesinar a sus dos esposas (Ilona Sores y Edith Fintor), a dos de sus hijos naturales (Dániel y Zoltán) y a dos de sus hijas adoptivas (Tünde y Andrea), así como de violación contra sus hijas.


El arresto
Tras ser arrestado y acusado, el juicio contra András Pándy, de 75 años, y su hija Ágnes, de 44, comenzó en el Tribunal de Bruselas, ante una gran expectación entre los medios de comunicación belgas. El pastor llevada cuarenta y cinco años viviendo y trabajando en Bélgica.

Pándy permaneció inmutable durante el testimonio de su hija. Sobre su relación incestuosa, Ágnes declaró: “Me dijo que me iba a iniciar, que no debía decírselo a nadie y que sería nuestro pequeño secreto”.

El testimonio de Ágnes
Ágnes, a quien las lágrimas le impidieron en varias ocasiones seguir el relato de los hechos, confirmó que, tal y como había dicho a la policía, asesinó junto con su padre a cinco miembros de su familia. La hija del pastor protestante, fruto del primer matrimonio de Pandy con Ilona Soares, explicó que asesinó, instigada por su padre, a su madre y a su hermano Daniel de un tiro en la cabeza.

Según Agnes, fue él quien mató a su hijo Zoltan, a su segunda mujer (Edith Fintor) y a su hija adoptiva Andrea, aunque ella estuvo en todo momento al corriente de las intenciones de su padre e insistió en que cada uno de estos asesinatos fue premeditado.

La reconstrucción de hechos
La policía localizó restos de varios cadáveres tras indagar en las casas que poseía el pastor. Eso terminó de hundirlo. Pándy fue sentenciado de por la vida en prisión. A su hija Ágnes le dieron veinte años.

Asombrosamente, cuando cumplió ochenta años, las autoridades de la prisión decidieron enviarlo a un asilo para ancianos jubilados, donde pasa sus días en completa tranquilidad. Allí ha vuelto a predicar.

cmcorpkillers.blogspot

lunes, 1 de febrero de 2010

Nueva masacre en Ciudad Juarez


El número de muertos tras un ataque a una fiesta de jóvenes estudiantes aumentó el lunes a 16, en un hecho que las autoridades temen haya sido cometido "al azar" por no encontrar explicaciones sobre su motivación.

En Ciudad Juárez, en donde ha habido miles de asesinatos violentos en los últimos años, las autoridades ofrecen un millón de pesos (poco más de 76.200 dólares) a quien informe sobre los responsables del ataque que hasta el lunes había dejado 15 muertos y 13 heridos.

"No tiene una razón lógica, una razón concreta por la cual se dio este evento, es algo que nos preocupa, actos de delincuencia fortuita como este o al azar, pudiera decirse... va mucho más allá de lo que había venido sucediendo y pone a Ciudad Juárez en una situación de mucho más peligro", dijo el lunes en MVS Radio el alcalde local José Reyes Ferriz.

El edil describió a las víctimas como "jóvenes buenos, jóvenes estudiantes, deportistas que no tienen nada que ver con actividades delictivas".

En posterior rueda de prensa dijo que un herido más había fallecido el lunes, lo cual elevó a 16 el número de muertos.

"Los juarenses debemos exigir que se investigue a fondo y debemos de exigir justicia ante estos hechos tan deplorables", señaló.

Al menos 15 pistoleros llegaron cerca de la medianoche del sábado a una vivienda donde unas 28 personas, en su mayoría jóvenes, realizaban una fiesta y comenzaron a disparar. Algunos intentaron huir por las casas contiguas.

La Procuraduría de Chihuahua, estado al que pertenece Ciudad Juárez, informó que 10 víctimas fueron encontradas sin vida en tres casas, tres jóvenes más murieron cuando eran trasladados en ambulancia y otro en el hospital. El lunes se reportó la muerte de dos más, mientras que 12 aún eran atendidos de varias heridas.

Las edades de la mayoría de las víctimas ha sido reportada de entre 15 y 20 años.

El fin de semana fue particularmente violento en zonas de México como Torreón, en el estado norteño de Coahuila, en donde comando llegó a un bar la madrugada del domingo y abrió fuego matando a 10 personas e hiriendo a 15.

El lunes, nuevamente en Ciudad Juárez, fueron asesinados en la madrugada cuatro hombres y una mujer dentro de un bar.

En el estado norteño de Sonora, las autoridades informaron que en la localidad de Magdalena murieron siete personas en un enfrentamiento entre dos grupos.

Al sur del país, en el estado de Guerrero, se reportaron dos hechos violentos en distintas zonas, en los que murieron dos personas y seis más resultaron lesionadas, incluidos cuatro policías atacados con granadas.

Familiares han dicho que las víctimas del ataque del fin de semana en Ciudad Juárez no tenían nexos con la delincuencia, y aunque algunos reportes señalaban que quizá alguno de los asistentes tendría algún vínculo que explicaría el móvil, el alcalde dijo que no estaba comprobado.

"Se están siguiendo todas las líneas de investigación y sin embargo no se ha llegado a determinar un móvil para el asunto", admitió el edil.

Una joven que sólo quiso ser identificada como Linda dijo a la AP que una de las víctimas fue su primo José Adrián Encina Hernández, de 17 años, a quien describió como un estudiante sobresaliente de un colegio de bachilleres local a quien el gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, le confirió un reconocimiento académico.

"Eran estudiantes... ¿qué mal les hicieron?... los dos estaban en el equipo de fútbol americano de la escuela, ¿dígame usted a quién le pudieron hacer daño?", dijo desconsolada Martha, una señora que perdió a dos hijos en la matanza.

Sólo en 2009 fueron asesinadas más de 2.250 personas en Ciudad Juárez, lo que la ha vuelto en la localidad con mayor número de crímenes dolosos.

La violencia relacionada con el crimen organizado se ha traducido en más de 15.000 asesinatos en todo el país desde diciembre de 2006, cuando el presidente Felipe Calderón declaró una lucha frontal contra los carteles de las drogas.

En el estado oocidental de Michoacán, la Procuraduría reportó la aparición de al menos 35 mantas firmadas por el cartel de las drogas de La Familia, en las que advirtió formará un frente contra el grupo rival de los "Zetas".